Según la OCU, los electrodomésticos que más energía consumen son la nevera (662 kWh al año de media), el congelador (563 kWh), la televisión (263 kWh), la lavadora (255 kWh), la secadora (255 kWh) y el lavavajillas (246 kWh).
Nevera
El frigorífico y el congelador son dos de los electrodomésticos que más consumen ya que están todo el día conectados. No obstante, se puede ahorrar algo de dinero aprovechando al máximo su volumen, ajustando el termostato entre 4 y 6 grados centígrados y no dejando la puerta abierta mucho rato. Lo más recomendable es que la nevera no esté ubicada en la cocina cerca del horno, de un radiador o de una ventana soleada.
Lavavajillas
Nuestra factura de la luz puede verse modificada cambiando el programa del lavavajillas. Según la OCU, los consumidores pueden ahorrar hasta un 20% si utilizan un programa económico (a 50 ºC en lugar de 60 ºC) y reservando el programa de lavado intenso únicamente cuando la vaijilla esté muy sucia.
Al contrario de lo que podría pensarse, el programa de media carga no ahorra mucha energía, así que es mejor esperar a llenar el lavavajillas por completo para ponerlo en marcha.
Lavadora y secadora
Para ahorrar en el consumo de luz por poner la lavadora y la secadora, lo aconsejable es utilizar el programa más frío posible en los lavados, así como el centrifugado más rápido. Además, si vas a planchar la ropa, es recomendable finalizar el programa de secado antes.
Televisión
¿Cuántas veces dejamos la televisión encendida sin ni siquiera hacerle caso? Este gesto tan cotidiano puede encarecer la factura de la luz. De media, los españoles pasan más de tres horas y media al día frente a la pequeña pantalla, lo que supone un consumo energético de hasta un 12%. Para ahorrar la solución no pasa por apagar la televisión o dejarla en ‘standby’, sino en desconectarla cuando no se esté utilizando. De no hacerlo, puede llegar a consumidr tanto como un ordenador a pleno rendimiento aunque no esté encendida.